6/15/2012

16-Shitei Funi

El guerrero siguió por un sendero que cada vez parecía estrecharse más. Era un bosque oscuro, tanto que Ichinén pensó que lo llamarían el "Bosque negro". Siguió avanzando, mientras su inquietud crecía inversamente proporcional a como se angostaba el camino. Ya algunas ramas espinosas le laceraban en los brazos, avanzaba cortando algunas de las ramas más grandes con su espada Daimoku. Cuando pensó que esa dificultad solo podía empeorar, la ramas cesaron y se encontró en un claro. El pasto parecía recién cortado, apenas una piedra desperdigada por allí, semienterrada en el terreno. Lo que si atrajo su atención fue un gato, situado como si fuera una efigie, en el centro del claro. El animal se encontraba sentado sobre sus patas traseras y miraba al guerrero con curiosidad. En derredor, tres caminos se abrían, sin contar el que había hecho el propio guerrero a su paso. El gato era gris en su parte superior y blanco por debajo. Parecía tener una pechera blanca como la nieve como si fuera una camisa. El gris se le dividía en el rostro, semejando a un antifaz.
-¿Y ahora por cual me conviene tomar? No tengo ningún mapa o referencia como para guiarme.-dijo el guerrero para si mismo.
-El camino es tan bueno o tan malo, dependiendo de tu intencionalidad en primera instancia para llegar a algún lugar determinado.-dijo el gato, apenas moviendo los labios.
Ichinén había visto extrañas criaturas y eventos peculiares en sus viajes, pero no un gato que hablara.
-Eres un gato que habla, es increible.-exclamó el guerrero.
-Eres un mono que razona, eso es increible.-respondió el felino.
Ichinén se sintió desorientado ante las palabras del animal.
-No era mi intención ofenderte, gato, pero no se tu nombre, no tengo otra manera de denominarte.-
-Mi nombre es Teban.-
El guerrero se presentó, mientras pensaba que nombre tan particular para un animal aun más extraño.
-Estoy buscando una forma de atravesar este bosque.-
-Bueno, toma cualquier camino, es lo mismo. Más tarde o más temprano saldrás de aquí.-
-Si, eso pensé. Pero quiero saber cual me conviene más o el más corto.-
El gato inclinó la cabeza a un costado, mirando a Ichinén.
-Eso es diferente. No cualquier camino es el más corto o te llevará donde deseas.-
El gato lo miraba fijamente como esperando ver que haría el hombre. Quizá en parte, sin comprender como ese ser humano estaba delante suyo. Viendo que no perdía nada con pedirle ayuda al gato Teban, Ichinén le explicó el motivo de su viaje, la busqueda de Kosen Rufu. Y su primer objetivo, encontrar a los tres maestros, o aunque fuera al primero de ellos. Antes de terminar el relato, el gato se lamió una pata y se la frotó contra una oreja hasta su hocico. Cuando el guerrero guardó silencio, algo incómodo por el repentino aseo del felino, el animal volvió a prestarle toda su atención.
-Eso es fácil, Ichinén. El camino del medio lleva al primer maestro, debes encontrar una estación de vanguardia, que es un puesto de avanzada o una especie de posta de Kosen Rufu. El lugar se llama Shitei Funi.-
-¿Kosen Rufu está cerca?-
-Dije que era una posta o similar, no que estuvieras cerca. Si a esta altura de tu camino o de la vida en general, no comprendes lo que te tomará encontrar esa tierra, abandona en este instante toda esperanza de hallarla.-
-Lo siento, no es por ser precipitado, me intrigaba que fuera tan simple.-
-No lo es. De hecho, encontrar al primer maestro no va a ser simple. Arhat Jina no es álguien que se queda quieto en un lugar, pese a que muchos tengan esa idea de sedentarismo y pasividad, él no es así. Incluso si estuviera ahora en la estación de paso, la oscuridad fundamental te pondrá trabas en tu camino.-
Ichinén se sentó sobre la piedra junto al gato, acercandose al felino.
-¿Oscuridad fundamental? He enfrentado demonios, incluso enemigos temibles como Rokutén.-
-Rokutén es solo uno más dominado por la Oscuridad Fundamental. Y este será un enemigo más dificil de combatir que cualquier otro que hayas enfrentado. Este no te dejará ni por un solo segundo. La estación de paso está del otro lado del siguiente estado, apenas saliendo del bosque por este camino.-
-No tengo problema, vamos de a un paso por vez. Me preocuparé de eso cuando llegue el momento, antes es futil.-
El gato parpadeó con toda gracia, como solo los gatos pueden hacer, en forma lenta y pensada.
-Muy bien, pongamonos en camino. Te acompañaré un trecho, no creo que hasta Shitei Funi pero al menos gran parte del camino, mientras te encuentres solo.-
El guerrero agradeció con una inclinación afirmativa de su cabeza. Se puso en pie, mientras Teban abría la marcha por el sendero entremedio. Se internaron en un túnel de espesura, en camino a la estación de paso.